Excursion a FERVENZA DO TOXA 3º Primaria

¡Por fin!, sin duda esa era la expresión que reflejaba la cara de los 39, (17 niños y 22 niñas), que el sábado 7 de marzo ocupaban los asientos del autobús que los iba a llevar a pasar su primer fin de semana de excursión organizado por la APA.

Algunos ya tenían la maleta preparada desde principios de semana; otras escuchaban atentamente en el telediario las predicciones del tiempo; “mami aunque den temporal, nosotros vamos”; alguna me confirmó que le había pedido a la Virgen en la capilla que no se suspendiera la excursión. Con tantas ilusiones y buenos deseos, era difícil que la excursión no saliera bien.

En más o menos una hora y media llegamos a la granja escuela Fervenza do Toxa, los niños/as que habían ido bastante tranquilos viendo una peli y hablando en el bus, recogieron su equipaje y fueron con los responsables de la granja a las habitaciones. Ocupamos dos para niños y tres para niñas, son cómodas habitaciones con literas donde alguno ya viviría su primera aventura: “dormir en la litera de arriba”. También en ese momento las monitoras les solicitaron - “requisaron” -: las chuches, las linternas y las cámaras de fotos (en la granja no dejan tener para evitar problemas). Ellos haciendo gala de su más tierna infancia entregaron todo a la primera, seguro que la próxima vez no los pillan tan cándidos.

A las 11:00 h. bajamos a la sala de reuniones y las cuatro monitoras nos explicaron la ginkana que íbamos a hacer por el bosque (con sus preguntas, sus pruebas y en la que lo importante era el trabajo en equipo). El bosque estaba precioso: todos fuimos alegremente buscando pistas, escuchando los ruidos del bosque y el río, riéndonos, sudando, ayudándonos, esperándonos, responsabilizándonos del material (unos más que otros…), comiendo alguna galleta y bebiendo agua, que nos daban las monitoras cuando comenzábamos a desfallecer. Eran las 3:15h cuando hambrientos y algo acalorados llegamos al comedor, nos merecíamos un buen plato de comida. Todos se portaron fenomenal en esta larga caminata por el monte y aprendimos en un entorno maravilloso algunos de los secretos del bosque y del patrimonio artístico de la zona.

En la hora libre se organizó algún partidillo, jugamos con la cuerda y descubrimos algunos de los lugares de la granja.

A las 17:00 nos organizamos otra vez en grupos: Unos fuimos a cuidar, recoger y visitar los animales (la vaca Toxa, la yegua, las ovejas, las cabras, el burro Chispa), las ocas, los gansos, las gallinas, los gallos, los conejos, etc. El otro grupo mientras tanto trabajó en el huerto, plantamos cebollas, repollos y lechugas y aprendimos como realizar una cultura ecológica ( preguntad a vuestros hijos que es un bancal, para qué se le pone ceniza a los repollos, como debemos combinar las hortalizas y verduras que plantamos…). Fuera de hora nos tomamos el bocata y cambiamos de actividad: el primer grupo para el huerto y el otro con los animales, así jugando y trabajando nos cogió la noche.

A las 21:00 todos a la ducha, las carreras por el pasillo, las toallas, la búsqueda de las chanclas, felizmente no hubo más que lamentar que alguna prenda desaparecida que al poco apareció.

Llegó la noche, y con ella el “via crucis” de los papás, que tuvieron que esperar pacientemente a que el cansancio acabara con los ánimos de los más despiertos, aunque a las 7 de la mañana ya hubo que ponerse las pilas, porque ya empezó la “marcha”.

El domingo lo aprovechamos un poquito menos, ya que la lluvia no dejó de acompañarnos, pero lo pasamos bien igualmente, eso sí, bajo techo.

La vuelta nos pilló con el DVD del autobús estropeado…lo que se antojaba un desastre de viaje (empezó un griterío ensordecedor), terminó con un trayecto de lo más entretenido, todo el autobús cantando y divirtiéndose desde la salida hasta que llegamos al colegio.

En resumen, una experiencia muy interesante, los papás acompañantes esperamos que vuestros hijos hayan disfrutado y recuerden con cariño este viaje.

Firmado: Belén, José Luis y José Manuel